Capítulo 8 "Porcentaje"

¡Splash!

Una figura humana cayó del cielo salpicando a la derecha las ondas verdes de jade (la hierba). La escalofriante y heladísima agua cubrió la parte superior de su cabeza en un instante. You XiaoMo estaba demasiado asustado por su curiosidad. Se agitó en el agua pensando que había caído al mar.

¡El problema era que no sabía nadar!

You XiaoMo pensó desesperado, ¿No me digas que me voy a ahogar justo después de venir aquí?

No pudo evitar lamentar su destino por morir prematuramente. Pensando de esta manera, You XiaoMo simplemente se rindió y dejó de luchar. Ya que estaba obligado a morir tarde o temprano, bien podría simplemente morir ahora. Solo esperaba no morir temprano en su próxima vida. Relajando todo su cuerpo, You XiaoMo esperó lentamente el momento en que se hundió hasta morir bajo el agua.

Tal vez porque se ha desquitado completamente, comenzó a sentir que algo no estaba bien. Abriendo los ojos, se quedó atónito al descubrir que el agua solo estaba a la altura de la cintura. 

-_- || (Aparecen líneas negras en su cara)

Sólo entonces You XiaoMo se dio cuenta de que ya no estaba en su habitación. Se encontró en un entorno desconocido, parado en un lago. El lago ocupa una quinta parte de la zona. Es un espacio peculiar. Arriba nubes blancas y cielos azules. Un día claro pero sin sol a la vista. Después de un análisis cuidadoso descubrió que todo era estático. Las nubes blancas no mostraban signos de movimiento. No había sonido de viento en el aire. La fresca hierba verde se inclinó hacia el suelo pero permaneció inmóvil. Incluso el lago debajo de él carecía de la menor ondulación.

You XiaoMo miró la lágrima azul que yacía tranquilamente sobre su pecho. ¿Podría ser que él estaba aquí ahora porque accidentalmente lo tocó? Con eso en mente, no pudo evitar estirar su mano y tocarla de nuevo. Inesperadamente todo se volvió negro ante sus ojos.

¡Splash!

Se encontró de nuevo en la tina de agua caliente. Su cuerpo que había estado completamente sumergido en el agua helada del lago comenzó a calentarse lentamente.

You XiaoMo se quedó mirando la lágrima azul en su pecho. Después de dudar por un buen rato finalmente decidió ignorarlo. Se apresuró a terminar su baño, salió de la bañera y se puso la ropa. Podría haber sido su imaginación, pero se sintió más vigorizado de lo que estaba antes.

Para descartar el agua del baño, You XiaoMo nuevamente realizó varios viajes. En ese momento el cielo comenzó a oscurecerse. No parecía haber nadie en pie, solo los ocasionales discípulos en patrulla. Debido a que era su primer día aquí estando en un entorno desconocido, You XiaoMo no se atrevió a correr insensatamente. Después de terminar de sacar el agua del baño, You XiaoMo regresó a su habitación. Encendió una vela iluminando la habitación, tomó el libro sobre su escritorio y continuó su lectura.

Hablando de magos, a pesar de que había tres grandes picos en la secta Tian Xin, la realidad es que muy pocas personas podían convertirse en magos. No se trataba de la falta de esfuerzo, sino de la falta de talento natural.

Para determinar si alguien podía convertirse en un mago, el método más directo era mirar su alma. Sólo las almas con auras de colores podían convertirse en magos. Los practicantes por otro lado, todos tenían almas transparentes incoloras. El continente de Long Xiang tenía miles y decenas de miles de personas, sin embargo, almas de colores aparecen en solo el uno por ciento de las personas. Es decir, solo uno de cada cien podía convertirse en mago.

Además, estos pueden no ser necesariamente magos de alto nivel, muy probablemente terminando como magos de bajo nivel. Claramente, los magos eran una rareza en el continente Long Xiang. Dado que ahora se utilizaba ampliamente el reconocimiento del alma de una persona para identificar posibles magos, la mayoría de las sectas principales tenían un cristal de detección de alma que era del tamaño de un tazón pequeño. Solo por esto You XiaoMo pudo evitar un desastre.

Después de ingresar con éxito a la secta Tian Xin como un discípulo de prueba, ya no tenía que evaluar su alma. Sin embargo, a donde va desde aquí todavía depende de sus propios esfuerzos.

<--Capítulo anterior

Siguiente capítulo-->